Conejo

Consciente de ser el más rápido de todos los animales de la montaña, este hecho la hace disfrutar de un carácter muy jovial y abierto. Nuestro conejo de monte es un orgulloso habitante de su tierra, puesto que fue de esta zona del Mediterráneo desde donde se extendió su descendencia por toda Europa, allá en tiempos de los romanos…

No es difícil verle cerca de loa humanos porque, aun siendo su máximo adversario, le gusta rondar sus campos, sus haciendas y casas, porque sabe que siempre va a encontrar alimentos de todo tipo y bebida abundante. Es el habitante natural del campo, de las montañas bajas y frondosas donde está a gusto sin meterse con nadie de su entorno.

Lagarto

Cuando el sol empieza a calentar de manera constante los campos de vid de nuestro entorno es muy fácil avistar a nuestro escurridizo amigo, el lagarto. Siendo posiblemente el reptil más veloz de todos, no tiene problema en escabullirse en su madriguera o entre alguna grieta o entre las piedras secas del muro que tenga más a mano. .

Aún así, quedan pocos; están en proceso de reducción por lo que es importante respetar sus hábitats naturales y sus zonas de paso. Nuestro lagarto, tras la hibernación tiene la necesidad de alimentarse y saciar la sed; algo que vio hacer al zorro de la montaña cercana y que rápidamente copió…

Mariposa

Un visitante muy habitual en nuestras viñas, sobre todo cuando se acercan las épocas templadas primero y las de más calor después. Nuestra mariposa es hermosa, altiva y llena de esplendor.

Aunque también hay que decirlo: es muy vulnerable y por eso suele esconderse debajo de las hojas en medio del clima nublado o lluvioso y se posan sobre de ellas durante la noche. A menudo sus colores y tonos son tan vigorosos que a nuestro paso despliega sus bellas alas para ofrecernos su más coqueto posado y exhibición. En situaciones de alerta reduce su exposición a la vista y minimiza la detección por parte de sus adversarios para pasar inadvertida. Se cobija entre las hojas de nuestras vides o debajo de hojas de cornejo, espino cerval, zarza o hiedra.

Zorro

Esquivo y elegante a partes iguales, el zorro que habita en estas tierras es de un color pardizo, no demasiado oscuro y de tamaño más bien mediano. Le gustan las montañas de esta zona del Penedès, que no hace mucho han obtenido la certificación Biosphere y esto es algo que le gusta a todos los habitantes de la naturaleza: se sienten más protegidos.

Se siente poderoso habitando en una zona en la que pocos adversarios tiene…excepto el humano, a quien soporta puesto que ha descubierto que elaboran unos néctares deliciosos a partir de unos frutos de colores que crecen en unos matorrales de troncos retorcidos que, por cierto, los hay a cientos!

Y hablando de néctares: nuestro astuto zorro, por las noches hace excursiones para aprovisionarse de ellos…